The Elder Scrolls Online ya está aquí con la intención de convertirse en un referente de los MMORPG.
Como podéis imaginar, el título nos lleva de nuevo hasta el mundo de Tamriel y tendremos que crear a un personaje, subir de nivel, elegir raza, clase y facción y saltar al ruedo completando ‘quest’ una detrás de otra para obtener experiencia, recompensas y objetos con los que mejorar los ‘stats’ de nuestro héroe. ¿Os suena? Efectivamente, los mismos usos que otros tantos MMORPG que ya vagan por el territorio de los free2play.
El planteamiento de Bethesda y Zenimax con The Elder Scrolls Online ha querido ser distinto y por esa decisión han montado un auténtico ‘galimatías’. Sobre todo en lo que tiene que ver con la perspectiva utilizada, que es la misma de sus Skyrim y Oblivion: primera persona que podremos poner en tercera aunque con las limitaciones impuestas por esta.
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